La primera calculadora la inventó un joven francés llamado Blaise Pascal (1623- 1662) en 1642. Era hijo de un recaudador de impuestos y buscaba la forma de reducir el tedioso trabajo de sumar grandes cantidades de números. El principio básico del mecanismo de ruedas de engranaje se aplicó a la mayor parte de las calculadoras mecánicas durante unos trescientos años.